Hoy te voy a hacer el lío, el vendaje… y todo para que descubras los beneficios del flossing en fisioterapia, y cómo esta técnica está revolucionando la fisioterapia para el manejo del dolor.
El flossing, también conocido como vendaje compresivo de corta duración, ha ido ganando popularidad en los últimos años, gracias a sus beneficios antes, durante y después. ¡Vamos a ver el porqué!
Antes de las terapias, el flossing se utiliza como una poderosa herramienta de preparación y potenciación. Al aplicar bandas de compresión elástica sobre los músculos y tejidos afectados, se crea una tensión suave y controlada que mejora la circulación sanguínea local y estimula los receptores sensoriales.
Esto permite una preparación óptima del tejido, reduciendo la rigidez y aumentando la extensibilidad muscular antes de la terapia, lo que se traduce en una mayor eficacia del tratamiento.
¿Qué sucede durante las terapias? Se crea un efecto de elevación de la piel y los tejidos subyacentes. Esto facilita el deslizamiento de los tejidos conectivos, reduciendo la fricción y mejorando la movilidad articular.
Además, la compresión controlada ayuda a modular la percepción del dolor, lo que permite a los pacientes realizar movimientos terapéuticos con mayor comodidad y seguridad.
Y al finalizar, contribuye a reducir la inflamación local, mejorar el flujo sanguíneo y estimular el sistema linfático, las técnicas de flossing aceleran la eliminación de desechos metabólicos y toxinas, promoviendo así una recuperación más rápida y eficiente.
Suena bien por el momento. Pero hay más. El flossband prolonga la sensación de alivio y favoreciendo la adhesión del paciente al tratamiento a largo plazo. ¿Cuántos pacientes no han vuelto por una cuestión de dolor y no de resultados?
Para nosotros como fisioterapeutas esta técnica se presenta como una solución no invasiva para el manejo del dolor. Además, los beneficios que ofrece en términos de preparación, optimización y recuperación son determinantes a la hora de plantearte incluirlo en tus terapias. ¿No crees?
Si te ha gustado descubrir los beneficios del flossing en fisioterapia, comparte este post con cuantos más compañeros. ¡Nos vemos el próxima reflexión!
